TRASTIENDA
La alianza entre Ernesto Cordero y la ex candidata presidencial Josefina Vázquez Mota para que respalde al senador en su intento por alcanzar la presidencia del PAN, puede romperse.
Al ver en la Trastienda del lunes el establecimiento de ese acuerdo político, quienes saben del tema levantaron las cejas y dijeron que podría no llegar a buen término. Y todo, dicen, porque por un lado este domingo que pasó Cordero dejó plantada a Vázquez Mota, y quizás no lo perdonen. Eso aún no lo saben. Pero lo que sí saben es que la designación del diputado y ex vocero de Felipe Calderón, Max Cortázar, como responsable de la campaña de Cordero, no causó nada de gracia y sí, en cambio, abandono del barco corderista.
Este miércoles se publica un desplegado a favor de la legalización de la mariguana promovido por un grupo de políticos y académicos encabezados por el ex rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, los ex secretarios panistas Fernando Gómez Mont y Jorge Castañeda, y el historiador Héctor Aguilar Camín. Los abajofirmantes provienen de diferentes trincheras e ideologías, pero hay dos nombres que sobresalen, por haber estado fuera de este recurso de información: el presidente de Grupo Azteca, Ricardo Salinas, quien ha tenido posiciones muy específicas sobre este tema, y quien fue el abogado de la francesa Florence Cassez, Agustín Acosta.
No entiendo la postura del PRD en la Reforma Energética, dice el senador Luis Armando Melgar. ¿En dónde se encuentra el argumento sobre la pérdida de soberanía? Propone don Luis Armando, de forma abiertamente provocativa, invitar a los foros en el Senado sobre la Reforma a Dagoberto Rodríguez y aHugo José García, porque seguramente tendrán algo que decir. En efecto, Rodríguez es embajador de Cuba en México y García es el de Venezuela, dos países de izquierda que en materia petrolera están mucho más abiertos que lo que propone incluso la iniciativa presidencial, y tienen las puertas sin candado para que inversionistas privados tengan el equivalente a los contratos de utilidad a los que se opone tajantemente la izquierda en México.
Los políticos, pero sobretodo los empresarios turcos, quedaron muy decepcionados por la cancelación de la visita del presidente Enrique Peña Nieto a Ankara y Estambul que iba a iniciarse el 2 de septiembre. Peña Nieto dijo tras suspender ese viaje por las dificultades que preveía enfrentar con las reformas energéticas y hacendaria, que no era una cancelación definitiva, sino una posposición. Dicen los que saben, que la cancillería turca está de plácemes porque comprobó que Peña Nieto les cumplirá. No el próximo año, como temían algunos, sino en diciembre, cuando ya está programada, negociada y agendada la primera visita de un jefe de Estado a esa nación que es un observador estratégico entre occidente y oriente.