Obstrucción, principal molestia que ocasiona el tren en Morelia

Martes 26 de Noviembre de 2013. Morelia, Michoacán.- Laura Flores, estudiante de 21 años de edad, residente en la colonia Lomas del Valle, comentó que las obstrucciones del tren le han traído consecuencias en el aspecto académico. “Salgo poco después de las 06:00 horas de mi casa hacia la universidad y es muy común que me toque el paso del tren; he llegado a esperar hasta 40 minutos y ya llega un punto en el que los maestros y compañeros no te creen que llegas tarde a causa de esto, ya he optado por tomar foto o video al ir pasando al tren para mostrárselo a los maestros, porque hasta a exámenes he llegado bastante tarde”, expuso la estudiante.

El caso expuesto no es aislado y no se limita sólo a estudiantes, sino también a empleados y comerciantes.

Manuel Pérez, de 25 años, quien se desempeña como recepcionista en el Hotel Las Palmas, ubicado en el cruce de la vía ferroviaria con la Avenida Madero Poniente, mencionó que ha habido ocasiones en que la obstrucción de la circulación se da hasta por dos horas y media. “Yo no tengo tanto problema porque llego a trabajar en moto y no se interpone en mi recorrido al trabajo, pero otro compañero que también trabaja aquí se ha visto en situación de dejar estacionado el auto en algún lugar al otro lado de la vía y pasarse entre los vagones del tren cuando está detenido o va lento para llegar a tiempo”, comentó Manuel.

La acción mencionada por el recepcionista es muy común en los cruceros, donde muchos peatones se ven forzados a esperar el paso del convoy ferroviario, pero otros se arriesgan a pasar entre los vagones mientras estos están en movimiento lento o detenidos, aunque con el riego de un movimiento inesperado que provoque algún accidente fatal; otros inclusive intentan ganarle el paso, como sucedió el 17 de agosto de 2010, cuando un joven que intentó ganar el paso fue golpeado por la locomotora y después decapitado por las ruedas de la misma, O lo sucedido en octubre de ese mismo año, cuando un ciclista que fue arrollado por el tren y perdió una pierna.

Armando Orozco es propietario de Armando’s Pizza, ubicada en la Avenida Michoacán a escasos metros del paso del tren por esta vialidad. El comerciante menciona que requieren de al menos quince minutos de espera para el paso del ferrocarril. “A todos los comerciantes que estamos aquí, cerca de las vías, nos afecta directamente; aquí sí le avisamos a los clientes que nos marcan para entrega a domicilio cuando está pasando el tren para que sepan el atraso, y muchos lo toleran pero otros no”, dijo el comerciante.

Orozco añadió que son muy comunes en la zona los accidentes entre automovilistas que intentan ganar el paso una vez que la vialidad está libre después de pasar el ferrocarril, lo que ha ocasionado incluso confrontaciones violentas.

Sin horarios establecidos

Todos los entrevistados por este reportero coincidieron en señalar que actualmente son muy variables las horas de paso del tren y la frecuencia con que lo hace, así como el tiempo para las maniobras, lo que afecta los cruces en las avenidas Siervo de la Nación y Madero Poniente.

Manuel Pérez mencionó que en la Avenida Madero Poniente ha estado interrumpida la vialidad por hasta dos horas y media, y llegó a percatarse de una frecuencia de paso de hasta diez ocasiones por ese cruce.

60 por ciento del transporte público es afectado

Entre los vehículos a la espera se observan desde bicicletas hasta tráileres, pero el sector del transporte público es uno de los más afectados en la capital michoacana.

En entrevista con Cambio de Michoacán, el líder transportista José Trinidad Martínez Pasalagua, manifestó como graves los perjuicios que el paso y maniobras ferroviarias provocan en la operación del transporte público, ya que cerca de un 60 por ciento de éste se ve afectado en sus recorridos.

Señaló que los retrasos totales en las rutas son de al menos 40 minutos, y son hasta seis o siete unidades de una misma ruta las que se llegan a juntar durante la espera. Hizo énfasis también en el riesgo que se puede tener para los usuarios el uso del puente de la Avenida Madero Poniente, el cual es usado por las rutas que circulan en el área para librar el obstáculo que les significa el tren.

Peligro latente

Otro aspecto que preocupa a los morelianos que habitan en las cercanías de las vías es el referente a los descarrilamientos que llegan a suceder, pues sólo en este año, el 25 de febrero y el 14 de abril se presentaron dos incidentes de este tipo.

En ninguna de las dos ocasiones se reportaron víctimas o lesionados graves, pero en el suceso del mes de febrero, entre los vagones que se descarrilaron había algunos que contenían material peligroso.

Estos hechos han causado la zozobra entre población aledaña a las vías del tren.